Nacida bajo el sol de Acuario
Autora: Florencia Bonelli
Segunda parte de una trilogía
Reseña de la primera parte haciendo click acá.
Resumen
Bianca tiene una vida complicada, llena de secretos que ocultarle a su caótica familia. Pero lo que no esperaba para nada es que uno de esos secretos fuera que Sebastián Gálvez, el chico del que está enamorada desde los 14 años, de pronto no sólo se fija en ella sino que también... ¿le gusta?
Entre drama y drama familiar, y algún que otro resabio del pasado de ambos, se irá construyendo su relación.
Reseña
Por dónde empezar...
Este libro es el segundo de la trilogía "Nacidas", de Florencia Bonelli, a la cual yo llegué cuando empezaba a interesarme más por la astrología y que había estado "buscando" por ello. Desde que descubrí más el mundo de los signos, no pude evitar pensar que libros basados en ello serían estupendos, pero no había mucho de donde elegir. Finalmente se presentó esta trilogía y la tomé.
Una vez terminado el primer libro, empecé a leer este, pero lo encontré excesivamente repetitivo: los mismos patrones de control y de "discursos de amor", no había nada único ni diferente en cómo se amaban Bianca y Sebastián que lo que había descubierto en el primer libro con Camila y Lautaro. Aún así, no lo descarté para siempre. El primer libro me había entretenido, si bien le puse un 4,5 de puntuación, y estaba necesitando alguna lectura ligera. De tal forma, un año y dos meses después, retomé la trilogía.
No voy a decir que fue un error, porque lo cierto es que, habiéndome olvidado de los detalles de la relación del primer libro, no lo encontré repetitivo en relación a él. Pero sí en sí mismo, y sí que fue terriblemente genérico, y sí que fue una historia alejada de lo que promete, y sí que se me hizo pesado.
La pregunta que cabe es: ¿por qué lo terminé si no me estaba gustando para nada (porque, créanme, no me estaba gustando)? He de decir que hay dos respuestas: la primera, me interesaba saber cómo iban a resolverse los dramas familiares; la segunda, aunque suene sorprendente, tengo ganas de leer el tercer libro, porque el personaje principal de ese, Bárbara, me llama la atención desde el primero (y es de Aries, merece ser un poco más interesante). Bueno y para qué mentir, las últimas 200 páginas las leí sólo por el gusto de asesinarlo en esta reseña y hacerlos reír un poquito. Así que cumplamos ese cometido.
Uf, es que es tanto que ni siquiera sé por dónde empezar.
Lo primero que promete el libro (por el título, los detalles de la edición, y la sinopsis) es astrología. Lo grita por todos lados: ESTE ES UN LIBRO DE ASTROLOGÍA, guiado por las estrellas, los signos y el cielo.
Bueno, no. Sí, tiene más cuota de "hablar de astrología" que la mayoría (por no decir todos, incluida su primera entrega), pero no está aplicado ni se ve reflejado ni tiene coherencia con la historia de amor ni con ninguna otra. Lo interesante astrológicamente que plantea es mediante discursos tercerizados ("la astróloga me dijo que..." "esto es porque tenés Plutón oposición a...que significa..."), bastante técnicos y sobre todo muy tirados de los pelos. Son escasas las situaciones en las que no queda colgadísimo. Para que se den una idea, en general la información gruesa astrológica la descubrimos en conversaciones entre Bianca, la protagonista, y Camila, su mejor amiga y protagonista del libro anterior. Esas conversaciones son tipo:
"- Ay amiga, me duele la panza
+ Y si amiga, ¡tenés Luna oposición Saturno y conjunción Marte en Capricornio! [explicación o muy detallada innecesariamente o súper vaga de las características de esa posición].
- ¿Vos creés que es por eso?
+ Sí amiga, pasa que no lo ves porque sos acuariana y pensás siempre las salidas más difíciles. También es tu Júpiter en casa IIX, que hace que [explicación o muy detallada innecesariamente o súper vaga de las características de esa posición].
- Tenés razón, ¿pero qué hago con Sebastián? Creo que no le puedo dar un beso si estoy concentrada en que me duele la panza...con su Sol en casa VI, le va a ser imposible no notarlo además...
+ Sí, tenés razón, el Sol en casa VI es [explicación o muy detallada innecesariamente o súper vaga de las características de esa posición]. Ya fue amiga, ahí está hablando tu Luna en Capricornio que te hace sentir que no merecés lo que tenés. Usá tu Venus en Leo y mandate".
No sólo suena irreal, lo es. Las personas que disfrutamos o estudiamos la astrología no hablamos así (digo, no sé profesionales o gente muy avanzada, me refiero a dos adolescentes de quinto año que leyeron del tema), y además Dios, yo habría mandado a la mierda a cualquier amiga a la que le voy con un problema y me responde que es por mi Luna en lo que sea. Si bien la astrología es excelente como herramienta y blah, como mucho primero dale un consejo real, escuchala, y después sorprendete del mucho sentido que tiene según su carta. Pero además... ¿qué es eso de que cuando tu amiga te cuenta no sé, que tuvo sexo con su novio por primera vez, sacás la astrología de nuevo? O sea...realmente, muy tiradas de los pelos todas las conversaciones entre Bianca y Camila, sobre todo las astrológicas.
Y eso es un gran problema, porque se supone que, como dije, lo primero que promete el libro es astrología. Ya falló en incorporar datos útiles al discurso (que ponele que entiendo que puede ser difícil igual, suponete que no sabías bien cómo encajarlo y bueno, quedó medio forzado), pero además falla en la caracterización. La historia es la misma siempre, se repite una y otra vez, y no estoy hablando sólo de que es el mismo esquema que vemos en el libro anterior (una chica que al principio recela por x o por y, un chico que la somete y enamora y termina siendo su dueño, casi literalmente), sino que las parejas que los circundan siguen los mismos patrones. El amor verdadero es de una forma, para toda la vida y celando a más no poder, e instantáneo; el amor que duele, el traicionero, es siempre de otra.
Portada del tercer libro |
Hay un tema en particular, la prostitución, que me parece que está relativamente bien tocado (me sorprendió teniendo en cuenta lo retrógrada que es la autora en su forma de construir relaciones amorosas), pero real, todos llegan a las mismas conclusiones y eso no funciona así. En la vida, la gente va a pensar distinto, va a comprender distinto, no todos van a llegar a la iluminada conclusión de que no hay que juzgar, etc.
Pasa eso con todo y con todos los personajes.
Para seguir bardeando esto que promete de la astrología, Bianca está todo el tiempo diciendo que es de Acuario y que su libertad es lo más y no se qué, y literalmente desde el minuto 1 se somete a todas las locuras que se le ocurren a Sebastián. Los pocos momentos en los que pone "frenos" en realidad no lo hace.
Se le va su actitud acuariana, si es que en algún momento la tuvo, y eso es terrible y tóxico y sigue el mismo patrón que el libro anterior: si se supone que la protagonista es de x manera, y que está bien, ¿por qué glorificás que todas esas características se le evaporen por el "amor verdadero"?
Uf, y si nos detenemos en ese "amor verdadero"... En lo segundo en lo que nos miente el libro es en las preguntas que se hace: "¿podrá entregarse al amor que durante tanto tiempo pareció inalcanzable?" no es una pregunta que esté planteada realmente en el texto. Desde el minuto CERO y, si queremos ser muy indulgentes, desde la página 100, ese problema ya está resuelto. Y son 600. Lo demás son ¿tira y aflojes? absolutamente innecesarios pero sobre todo inverosímiles, cansadores, que se resuelven en seguida porque "son el amor de la vida del otro". El problema más grave que pasa entre ellos se resuelve a los dos minutos y ya están amándose irremediablemente a las cuatro páginas. Nunca se pone en duda el "amor" que se tienen. Uno desde el minuto cero sabe que Sebastián ama a Bianca y Bianca ama a Sebastián.
Otra edición del primer libro |
Me suelen gustar e interesar los dramas familiares, así que me gustó que hubiera muchos, aunque en varias partes quedaban en pausa para otro extenso y aburrido diálogo de los enamorados diciéndose empalagosamente que son el amor de la vida del otro y que no pueden soltarse ni separarse nunca (aprox es de lo único de lo que hablan o en su defecto es a la conclusión a la que llegan en el resto de los diálogos, que son de conflictos, y tienen diálogos bastante seguido así que créanme, me quedó claro) o repulsivas escenas de sexo cis heterosexual en los que aparte de describirlo de formas muy ¿? SE SIGUEN DICIENDO QUE SE AMAN Y NECESITAN Y NUNCA SE VAN A SEPARAR por Dios, ojalá me tomasen prueba de eso, 600 páginas diciendo lo mismo.
Pausemos un segundo en eso: el sexo. Como cosas positivas, hay mucho y no lo demonizan, usan preservativo y métodos de anticoncepción, bancamos. Como cosas negativas, es cada dos minutos, siempre igual cuando está descripto (aunque cambie el escenario), cero revelador, cero excitante por si cabía alguna duda, y cero erótico realmente. Ponele que alguno que otro podía ser un tanto estético, pero ya está. Dan paja, Dios, son personajes tan paja, sosos. Además se supone que la acuariana es la única, diferente, distinta...bueno, NO, es una mili pili cualquiera, le falta jugar al hockey.
Eso fue interesante igual, como al segundo capítulo caí en parte del problema por el cual lo sentía tan lejos: son tinchos y milipilis, todos. Hablan rarísimo, tienen valores y costumbres muy alejados, y son huecos :p Además son demasiado correctos, todos, lo cual de nuevo, va súper en contra de lo que se supone que quiere transmitir de Acuario. La misma manera de escribir es muy mili pili, le sale pésimo todo el ambiente boliches-drogas y sobre todo el flash colegio público/adolescencia en un lugar que no sea un Country en Pilar y un colegio privado y católico.
En fin, un horror, y eso que todavía no llegué a la parte más horrible: el nivel de toxicidad uf, de nuevo, Chernóbil no es nada.
Si me siguen en Instagram vieron lo que puse, pero si no (deberían, hagan click en "Instagram"), cito:
[situación: a Bianca le pegó el padre y luego de unos días quiere pasar por su casa a agarrar material de estudio e irse de nuevo]:
"[Gálvez]-No. Le pedís a tu abuela, a tu tía, a quien sea, pero no volvés a ese lugar. Bianca, así es como estos hijos de puta terminan matando a sus hijas y a sus esposas, porque ellas se dejan. Sí, no me mires así. Vuelven como borregos al matadero, una y otra vez, a pesar de que el hijo de puta les da piñata para que tengan y guarden. Al final, están tan enferemas como el golpeador con el que viven. Eso leí una vez. Pues bien, vos no sos una enferma como lo son esas minas. A mi mujer, nadie, nunca, jamás la va a volver a tocar. Me vas a hacer caso en esto, y me importa una mierda si te sofoco, si te quito la libertad (...)"
Una más, que en Instagram no puse:
"[Gálvez]-Es mi novia, vieja. Y si llega a curtir con otro, la mato."
Les describo algunas otras cosas: se ven todos los días, el chabón es súper controlador, le hace hacerse millones de estudios médicos por un sueño que tuvo en el que se moría, la cela a niveles horribles y se "angustia" por todo, de la nada, interfiere en situaciones en donde nadie lo llamó, como si fuera el representante de Bianca en todo. Si a él algo no le parece, Bianca no puede hacerlo porque "no quiere disgustarlo". Cuando Bianca tiene un accidente o está triste, piensa "ay, pobre, la angustia que le hice comerse A ÉL". Gálvez la obliga, "porque tiene miedo de que le pase algo", a dejarlo llevarla a todos lados en auto o, en su defecto, en un taxi que él conoce y contrata, manejado por un viejo tierno para que tampoco le pueda fichar nada.
En fin, realmente, es terrible, en todos los sentidos.
Nada, punto, se me hizo larguísima esta reseña, es que había muchas cosas de las que hablar. En resumen: es un libro muy mal construido, muy genérico, rellenado con personajes insufribles y vacíos que se supone que siguen el parámetro de "amor al que se aspira", que ni siquiera cumple con lo que promete. Ah, y otra cosa: sigue a rajatabla todos los patrones de relación machista cishetero, patriarcal, en la que la mujer pierde cosas para someterse a los deseos y voluntades del hombre, también sigue miles de patrones de relación abusiva (el novio controlador "por su propio bien" "qué caballero"). Hacen varios comentarios del estilo "no es cuestión de ir tentando y después no concretar", y la protagonista se pone mal por dejarlo caliente al chico. Tipo realmente se angustia por eso y te lo venden como que "ella es la buena señorita, la que se preocupa por lo que hay que preocuparse, mirá qué bien, lo tiene en cuenta".
Ahora sí, por último de verdad, los temas familiares que trata son: el abandono, el maltrato infantil, la bulimia, la prostitución. He de decir que es lo único que no hace tan mal.
pero más allá de eso, ASCO. Mucho asco.
No recomiendo ni la trilogía ni particularmente este libro, si tienen el primero, como quieran, pero este no lo compren, posta.
Mi puntuación:
2/10 (porque me quedé con alguna data piola de astrología y porque me gustó en ciertos puntos de los dramas familiares).
Ya tenemos finalista para el "Peores lecturas 2021".
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